top of page
  • Foto del escritorAlucinos

23/9/2020 Mesa y mantel. Análisis sociológico del proyecto 'comedor social' de Alucinos La Salle

Actualizado: 23 sept 2020

23 de septiembre de 2020


A mediados de 2019, la Asociación Alcinos La Salle, comenzó un proyecto llamado: Comedor social y colaborativo.


El porqué de la creación de este proyecto, era realizar una obra social con aquellas personas que forman el final de la cadena de vulnerabilidad: las personas sin hogar, o vulgarmente llamados personas sin techo.


Es evidente que estas personas no disponen de ningún recurso, y por tanto una de sus necesidades fundamentales es la comida. Pero también es cierto, que restringiéndonos solo a Madrid, existen bastantes comedores sociales, a través de ONGs, o por parte de la administración local, que realizan esta misión.



Pero en nuestro comedor social de nombre ’Arima Abuba’ se planteaba otros objetivos y cubrir otro tipo de necesidades. Nuestro objetivo primero, era que nuestros beneficiarios, además de comer una comida sana y saludable, fuese un sitio de encuentro donde ellos podrían permanecer desde la mañana hasta media tarde.

Esto resultaba muy interesante, porque de esta forma, disponían de un hogar donde podían estar, sociabilizar entre ellos y con personas de la asociación, leer libros que tienen a su disposición, utilizar ordenadores para aquellos que ya sabían algo de informática, e incluso recibir clases básicas de esta disciplina para irles introduciéndolos a poco en este mundo telemático.


Además, el nombre de comedor colaborativo, tampoco es baladí. Otro de los objetivos prioritarios de este proyecto, era precisamente que en el funcionamiento del comedor participaran todos sus participantes, además del personal de la asociación.

De acuerdo a sus habilidades, unos guisaban, otros atendían como camareros y otros fregaban y limpiaban las instalaciones.


Y por último, pero no menos importante, ofrecerles también, la posibilidad de comer con mantel de tela, una comida bien servida, rica y equilibrada. Esa sensación es relajante y satisfactoria y aumenta la autoestima de cualquiera.


Estos eran nuestros objetivos. Proporcionar un hogar (durante el día), la necesidad de sociabilizar con otros como ellos y con los técnicos, cubrir las necesidades alimentarias (podían hacerse café, comer y llevarse comida para la cena) , y colaborar en el proyecto, fomentando su autoestima y su interés.


El proyecto comenzó con 15-20 personas, que en la mayoría de los casos siguen con nosotros, pero desde la aparición del COVID19, ya no se pueden reunir todos juntos, pero vienen y se les suministra comida en tuppers o bien bocadillos.


Los resultados que obtenidos nos satisfacen enormemente, pues como ya se ha comentado, casi todos siguen con nosotros y han mejorado sus pautas de comportamiento incluso hemos conseguido a algunos llevarles a sitios de rehabilitación de drogadicciones.


Y todo esto queda demostrado en el trabajo de investigación correspondiente al trabajo de grado para trabajo social realizado por EMILIO ALANÍS GUTIÉRREZ, que ha sido voluntario en este proyecto y que ha titulado: MESA Y MANTEL Prácticas transformadoras en la acción social con personas sin hogar en un comedor colaborativo.



Al final del apartado de conclusiones, Emilio termina así: ‘De manera particular, aquellas que potencian las relaciones sociales, la restructuración del tejido social de los participantes y las que permiten un acompañamiento más cercano y humano por parte de los profesionales. Esto dignifica la deteriorada situación personal de muchos de los participantes que cruzan la puerta de Taconera 19.’(*)

Abajo, tenéis el enlace al mencionado trabajo.


(*) Taconera 19, es la dirección del comedor social y colaborativo

TRABAJO FIN DE GRADO. MESA Y MENTEL
.pdf
Descargar PDF • 2.77MB

59 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page