21 de septiembre, Día Mundial del Alzheimer
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22 de septiembre de 2025
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que existen más de 55 millones de personas con algún tipo de demencia en el mundo. De entre todas las demencias, la más frecuente es la enfermedad de Alzheimer, afectando a entre un 60% - 70% de los pacientes con demencia.
En la enfermedad de Alzheimer (EA), las células cerebrales de las zonas que controlan la memoria, el pensamiento y el lenguaje van muriendo y el cerebro se "encoge", como se ve en la foto de arriba. Poco a poco, la persona afectada va perdiendo la habilidad para realizar las tareas diarias normales.
La enfermedad produce dos cambios fundamentales en el cerebro:1. un enmarañamiento de las fibrillas de las neuronas, conocido como ovillos neurofibrilares, 2. el depósito de una sustancia viscosa de tipo proteico llamada beta-amiloide, que provoca una selectiva y progresiva pérdida de neuronas. La beta-amiloide se acumula en forma de "pegotes" llamados placas neuríticas, que aparecen rodeadas por los restos de ramificaciones destruidas de las neuronas afectadas.
Actualmente, se diagnostican unos 10 millones de nuevos enfermos con demencia en todo el mundo
Incidencia en Europa
La incidencia en los países del sur de Europa (Grecia, Italia y España) fue 8,97 por 1.000 personas-año (IC del 95%, 8,13-9,86), mientras que en el norte de Europa (Francia, Reino Unido, Suecia y Dinamarca) fue 15,94 por 1.000 personas-año (IC del 95%, 14,25-17,72).
Al igual que la prevalencia, la incidencia de EA en las mujeres fue más alta que en hombres, 13,25 por 1.000 personas-año (IC del 95%, 12,05-14,51) frente a 7,02 por 1.000 personas-año (IC del 95%, 6,06-8,05). De igual manera, existió un aumento con la edad. En los grupos de 65-74 años, 75-84 años y más de 85 años, la incidencia fue 3,43 por 1.000 personas-año, 13,78 por 1.000 personas-año, y 35,74 por 1.000 personas-año, respectivamente
Incidencia en España
Al examinar los datos de población de España, se observa una ligera disminución de la población española entre 2018 y 2025, seguida de una fuerte disminución entre 2025 y 2050. El número total de personas con demencia se duplicará con creces, pasando de 852.741 en 2018 a 1.741.462 en 2050. De igual forma, como porcentaje de la población total, las personas con demencia representarán el 3,99 % en 2050, en comparación con el 1,83 % en 2018. España supera ligeramente la tendencia europea general de que el número de personas con demencia prácticamente se duplique para 2050.
Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), en España hay aproximadamente 800.000 personas diagnosticadas con la enfermedad de Alzheimer.
Se calcula que un porcentaje significativo de casos leves no están diagnosticados, lo que podría elevar la cifra total de afectados.
La enfermedad de Alzheimer es la forma de demencia neurodegenerativa más común en el país.
Se ha realizado un estudio de las principales áreas de reducción del riesgo de demencia:
reducción del riesgo físico (dieta, salud cardíaca, pérdida auditiva, deportes...)
salud cerebral (educación y formación cognitiva, contacto social, depresión...)
riesgos ambientales y a nivel poblacional (determinantes sociales de la salud, desigualdades socioeconómicas, intervención gubernamental,
contaminación atmosférica...)
riesgos no modificables (riesgo genético, sexo y género, sociedades en proceso de envejecimiento...)
reducción preventiva del riesgo (intervenciones en la infancia y durante toda la vida, detección temprana...)
y reducción del riesgo después del diagnóstico (riesgos modificables para desacelerar el avance, actividades significativas, motivación...).
Hay cosas que no se pueden controlar, como la genética, desigualdades soci económicas, etc..(la genética, la contaminación, las desigualdades socioeconómicas, incluso las hormonas), pero podemos hacer pequeños cambios en nuestras vidas diarias que pueden reducir nuestro riesgo.
Aunque en la actualidad no es posible curar esta enfermedad, se pueden hacer muchas cosas para para intentar reducir el riesgo de padecerla. De momento es todo en cuanto a la cura, pero si que podemos y debemos hacer, es que las personas que ya la tienen, la sociedad les proporcione unos cuidados para mejorar su calidad de vida.
Bibliografia
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